La ira de los dioses. Cuando el cielo se desploma sobre nuestras cabezas ¡por Tutatis!
Tormenta de verano en los alrededores de Cáceres, Extremadura
Nikon D300. Zoom Nikkor (35 mm) f.8 24 s. -1.3 EV
Hubo un tiempo en que los libros de historia natural describían dragones, unicornios y otras criaturas que, evidentemente, siguen habitando entre nosotros como puentes con la Antigüedad, entre realidad y ficción, entre ciencia y mito. Es tan real, que parece fabuloso.
Impresionates momentos ¡en menos de 30seg.!
ResponderEliminarTuvo que ser una buena tormenta de luz y sonido,
...y olor a tierra mojada....
Vaya momento tan espectacular! Yo creo que ha sido un castigo divino por lo de los grillos...aunque no sé si habría rayos fulminantes para tanta gente! Muy bien resuelta pese a la contaminación lumínica, con una gama de colores excepcional en esa masa de nubarrones.Qué lujo de terraza!
ResponderEliminar¡¡Excepcional foto!!. LLevo esperando a fotografiar rayos, desde que tengo camara y aun no se me ha presentado la oportunidad.
ResponderEliminar¡¡Que envidia!!
Un saludo.
Una foto que impresiona por lo definido de esas aterradoras nubes barrigonas, por suerte me pilló en casa.Hace tan poco hablamos de los rayos y mira por donde te has pegado un festín. Un saludo.
ResponderEliminarLa ira de los Dioses, tú lo has dicho. ¡Impresionante! Una pasada :)
ResponderEliminarRayos y centellas!...o cuando se junta el cielo con la tierra, menuda os cayó!.
ResponderEliminarImpresiona esa fotografía, que diminutas se ven las luces de la ciudad frente a la fuerza de las de la naturaleza.
Cuando otras cámaras enfocaban al suelo la tuya miraba al cielo.
Besos.
preciosa imagen, merece la pena la espera para esta caza tan peculiar.
ResponderEliminarte enlazo, saludos
Vaya espectacularidad. Siempre me emocionaron las tormentas y esta foto refleja muy bien la apubullante fuerza de una de ellas. Te sigo.
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