Trevejo (Villamiel) se esconde en la sierra de Gata, al norte de Extremadura. Un lugar para perderse. Un lugar que no hay que perderse.
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Hubo un tiempo en que los libros de historia natural describían dragones, unicornios y otras criaturas que, evidentemente, siguen habitando entre nosotros como puentes con la Antigüedad, entre realidad y ficción, entre ciencia y mito. Es tan real, que parece fabuloso.
Querido am,igo, me encanta el lugar, por la paz que respira, por el sosiego que aporta, por la luz y porquè perderse en un lugar así, corres el riesgo de no volver. Gracias por compartirlo. Un beso.
ResponderEliminarHola.
ResponderEliminarVeo que después del último cielo azul han vuelto los "nublos".
Me gustaría encontrar ese ángulo exacto que tan bien dominas para que en perfectas proporciones salga suelo, horizonte, cielo...
Precioso paisaje y magnífica fotografía.
Genial juego de palabras en el texto, me gusto... Pero la fotografia... wou, realmente grandiosa, muy buena, las nubes negras le dan su toque especial...
ResponderEliminarSaludos!